¡Túneles oscuros de espesa negrura!
Eso es lo que veo, sin sentimiento,
sin cordura, en los límites de la locura.
Ni una chispa, ni un atisbo, ni una esperanza.
Sólo esos malditos túneles, uno tras otro,
concatenándose en mi deteriorada mente.
Atravieso con esfuerzo la espesura,
mi corazón palpita frenético, desenfrenado,
no hay fin, ni principio, ni razón,
hay nada, y, ala vez, todo,
no consigo salir de este maldito laberinto.
¿Alguien puede prestarme ayuda?
El Infierno debe ser muy parecido a esto,
no existen los recuerdos, ni las expectativas,
las ideas solidifican en mi cabeza,
y me producen dolor, agudo y ajeno,
rabio de dolor, rabio de impotencia,
no hay escapatoria, sólo incertidumbre.
Caigo al suelo, una y otra vez,
me cuesta un inmenso esfuerzo levantarme,
y cuando lo hago, vuelvo a caer,
y cuando vislumbro el fin, viene un principio,
otro final, sin esperanza, sin escape.
Percibo el mal, sí, aquí sólo hay mal.
¡Espesa negrura de túneles oscuros!
¿Me vais a conceder la muerte?
¿O me otorgaréis la tortura?
Sí, creo que es eso, la eterna tortura.
¡Túneles oscuros de espesa negrura!
Ya no soy yo, ¡qué extraño!Me siento espesa negrura.
Eso es lo que veo, sin sentimiento,
sin cordura, en los límites de la locura.
Ni una chispa, ni un atisbo, ni una esperanza.
Sólo esos malditos túneles, uno tras otro,
concatenándose en mi deteriorada mente.
Atravieso con esfuerzo la espesura,
mi corazón palpita frenético, desenfrenado,
no hay fin, ni principio, ni razón,
hay nada, y, ala vez, todo,
no consigo salir de este maldito laberinto.
¿Alguien puede prestarme ayuda?
El Infierno debe ser muy parecido a esto,
no existen los recuerdos, ni las expectativas,
las ideas solidifican en mi cabeza,
y me producen dolor, agudo y ajeno,
rabio de dolor, rabio de impotencia,
no hay escapatoria, sólo incertidumbre.
Caigo al suelo, una y otra vez,
me cuesta un inmenso esfuerzo levantarme,
y cuando lo hago, vuelvo a caer,
y cuando vislumbro el fin, viene un principio,
otro final, sin esperanza, sin escape.
Percibo el mal, sí, aquí sólo hay mal.
¡Espesa negrura de túneles oscuros!
¿Me vais a conceder la muerte?
¿O me otorgaréis la tortura?
Sí, creo que es eso, la eterna tortura.
¡Túneles oscuros de espesa negrura!
Ya no soy yo, ¡qué extraño!Me siento espesa negrura.
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