Hoy he vuelto a la casa, ¡qué tristeza!
Cambiar de lugar nos provocó una enfermedad,
¿fue un error? No lo sé, quizás,
o quizás todo habría ocurrido de todas formas,
entre nosotros se tendió un túnel,
un túnel amargo, oscuro, triste, muy triste,
un socavón de incomunicación,
un racimo de obsesiones malditas,
se nos olvidó el amor,
se nos olvidó quiénes éramos,
olvidamos que nos conocimos,
que nos quisimos,
que nos amamos,
todo por una aventura
que no supimos afrontar,
¡qué tristeza!
Cada centímetro de la casa...
cada mueble, cada habitación...
de verdad, ¡qué tristeza!
En vez de abrírsenos un horizonte,
se nos abrió una grieta oscura.
En vez de cerrarla,
la agrandamos,
fomentamos la incomprensión,
nos encerramos en nosotros mismos,
ya ni nos conocíamos,
ya ni hablábamos,
y cuando lo hacíamos,
era para gritarnos.
Soledad a espuertas,
aun estando juntos,
aun estando cerca.
Parece un mal sueño, ¿verdad?
Y sin embargo no lo es,
tuvimos que romper,
tuvimos que desaparecer,
el uno del otro,
ya no había remedio,
éramos un juguete roto,
sin posible reparación,
sin comprensión,
sin luz,
sin corazón,
¡cuánto dolor!
¡Qué tristeza!
¿Qué fue lo que pasó?
No tengo ni idea.
Acabé perdido,
sin rumbo,
sin esperanza ,
sin luz,
¡qué inmensa tristeza!
Cambiar de lugar nos provocó una enfermedad,
¿fue un error? No lo sé, quizás,
o quizás todo habría ocurrido de todas formas,
entre nosotros se tendió un túnel,
un túnel amargo, oscuro, triste, muy triste,
un socavón de incomunicación,
un racimo de obsesiones malditas,
se nos olvidó el amor,
se nos olvidó quiénes éramos,
olvidamos que nos conocimos,
que nos quisimos,
que nos amamos,
todo por una aventura
que no supimos afrontar,
¡qué tristeza!
Cada centímetro de la casa...
cada mueble, cada habitación...
de verdad, ¡qué tristeza!
En vez de abrírsenos un horizonte,
se nos abrió una grieta oscura.
En vez de cerrarla,
la agrandamos,
fomentamos la incomprensión,
nos encerramos en nosotros mismos,
ya ni nos conocíamos,
ya ni hablábamos,
y cuando lo hacíamos,
era para gritarnos.
Soledad a espuertas,
aun estando juntos,
aun estando cerca.
Parece un mal sueño, ¿verdad?
Y sin embargo no lo es,
tuvimos que romper,
tuvimos que desaparecer,
el uno del otro,
ya no había remedio,
éramos un juguete roto,
sin posible reparación,
sin comprensión,
sin luz,
sin corazón,
¡cuánto dolor!
¡Qué tristeza!
¿Qué fue lo que pasó?
No tengo ni idea.
Acabé perdido,
sin rumbo,
sin esperanza ,
sin luz,
¡qué inmensa tristeza!
¡Cuánta tristeza!
5 comentarios:
Es un poema muy sincero,sin embargo denota cierta culpabilidad. ¿De qién?
Tendrías que recapacitar en quién abrió la grieta y quien tuvo la aventura que nunca reconoció y nunca pidió perdón
hay un poema de Becquer que te viene como anillo al dedo, quiza no se si lo conoces dice algo asi "a sus ojos asomo una lagrima y a mis labios una frase de perdon..." por lo visto pudo mas el orgullo de los protagonistas,igual a vossotros os paso algo igual
¡ Qué pena que ocurran esas cosas ! Compartir tantas cosas e ilusiones y al final terminar como estraños. ¿Verdad?
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