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Al otro lado

Al otro lado
"Al otro lado", de Paco Gómez Escribano. Editorial Ledoria. I.S.B.N.: 978-84-15352-66-2.
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Presentaciones:

Sábado, 27 de abril a las 12 h. en la Feria del libro de Granada, en el Centro de Exposiciones de CajaGRANADA Puerta Real. Me acompañará en la presentación el compañero de Granada Jesús Lens. Y a las 13 horas firma de ejemplares en la Caseta de Firmas.

Sábado, 20 de abril, de 11 a 13 h. y de 17 a 20 h. en la Feria del Libro de Fuente el saz de Jarama.

Sábado, 26 de enero a las 20 h. en el Museo Municipal de Alcázar de San Juan. Me acompañará en la presentación el compañero de Ciudad Real José Ramón Gómez Cabezas, autor de "Réquiem por la bailarina de una caja de música", de la Editorial Ledoria.

Martes, 23 de octubre a las 19.30 h. en la librería Estudio en Escarlata (Guzmán el Bueno 46, Madrid). Si no puedes acudir y queréis un ejemplar firmado, ponte en contacto con ellos y pídeselo (91 543 0534). Te lo enviarán por correo.

Miércoles, 24 de octubre a las 18 h. en Getafe Negro (Carpa de la Feria del Libro). A las 20 h. participaré en una mesa redonda con otros compañeros de la Editorial Ledoria titulada "En los arrabales de la Novela Negra.

jueves, 2 de abril de 2009

Dulce silencio

Susurros huecos y descarnados,
que galopáis siniestros hacia mis oídos,
ya no os echo de menos,
un tiempo más y os olvido,
ahora estoy feliz, sereno,
y gozo de tanto en tanto,
del esperado y dulce silencio.

Silencios que no me pesan,
silencios que me abarrotan,
que me llenan, que no agotan,
que destierran tus gritos,
hasta el lugar de las sombras,
que me llevan sin remedio,
hasta el deseado y dulce silencio.

Sombras que me persiguieron,
que me asustaban, que me hirieron,
que me desplazaban y me hundían,
hasta el mismísimo Infierno,
y nadie me rescató,
nadie me socorrió,
salvo el tierno y dulce silencio.

Que me acogió como a un niño
y me presentó a la ausencia,
y me susurró despacio la soledad,
hasta me enseñó el desprecio,
y me insufló novedad,
olvidando los fantasmas,
llenos de oscuros silencios.

Tardes desangeladas, tediosas,
que se anclaron en mi vida,
como alimañas por arpones heridas,
como ramos de pestilentes rosas,
que sintieran el desprecio,
por las virtudes que otorga
el divino y dulce silencio.

Ahora ya no os anhelo,
rosas negras del olvido,
siniestras y perversas olas,
de malicia y de desvelo,
ahora vuelvo a disfrutar
y descanso, y ya no me desvelo,
porque por fin vino a mi el calmo y dulce silencio.

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